El Salvador se ha consolidado como un destacado exportador de servicios de centros de llamadas (call center) y BPO (subcontratación de procesos de negocio), alcanzando un valor cercano a los 500 millones de dólares por año. Este dinamismo obedece a una combinación de factores estructurales y ventajas competitivas, evidenciando la madurez del sector y su aporte significativo a la economía nacional.
Aumento constante en ganancias provenientes del centro de llamadas
De acuerdo con datos del Banco Central de Reserva, los ingresos generados por este rubro alcanzaron cerca de 394 millones de dólares en 2019, cifra que ascendió a 403 millones en 2020, y después trepó a 487 millones en 2021. El crecimiento continuó durante 2022, con proyecciones que apuntaban a cerrar alrededor de los 500 millones al término del ejercicio, basadas en los 423.7 millones descritos en los tres primeros trimestres.
Este comportamiento refleja un aumento consolidado de aproximadamente 8.8 % entre 2019 y 2020, así como de 21 % entre 2020 y 2021 . La fortaleza del sector no solo radica en cifras de exportación, también en su capacidad para generar empleo y atraer inversión extranjera.
Crecimiento del empleo
La industria de call center y BPO ha sido una fuente creciente de empleo para el país. En 2022, las principales compañías del sector reportaron la creación de unos 28,000 puestos bilingües, representando alrededor del 8 % de crecimiento anual, según cifras oficiales del Ministerio de Economía. AmCham también destacó que solamente en 2024, diez empresas del ramo generaron cerca de 12,000 nuevos empleos diario.
Estas cifras combinadas muestran que en menos de dos años, el sector ha añadido entre 40,000 y 50,000 empleos, consolidando al país como un importante centro de atracción de empresas de servicios globales.
Claves de competitividad
El desarrollo de El Salvador no es un azar: la nación ha sacado partido de factores tales como:
- Proximidad cultural y geográfica con Estados Unidos.
- Uso del dólar como moneda nacional, lo cual ofrece estabilidad cambiaria para inversionistas.
- Fuerza bilingüe, con salarios competitivos y alta rotación de personal capacitado.
- Nearshoring, el traslado de servicios previamente radicados en Asia, especialmente Filipinas, hacia América Latina.
La conjunción de estos factores ha permitido que firmas globales vean en El Salvador una plataforma ideal para centros de atención y soporte técnico.
Calidad de empleo y trayectorias
Los salarios base en atención al cliente en estas empresas se sitúan entre 500 y 600 dólares mensuales, mientras que roles técnicos o bilingües pueden llegar a 700 dólares e incluso 1,200 según la especialización Las percepciones son mixtas: muchos trabajadores lo consideran un trampolín profesional, mientras otros advierten sobre exigencias emocionales y horarios poco flexibles.
Reddit recoge testimonios como:
“El salario base hoy es de $500 base, eso están pagando para customer service… Sigue siendo mejor que lo que pueden ganar algunos recién graduados”
“Para un novato sin experiencia… es una opción bastante buena”
Sin embargo, también se señalan desafíos como estrés recurrente, presión por métricas y regulaciones estrictas sobre descansos .
Contribuciones a la economía del país
El sector de servicios –incluyendo call center– ha sido responsable de importantes exportaciones: casi 6,000 millones de dólares en servicios totales durante 2024. El rubro call center representa una porción destacada de ese total, contribuyendo a una balanza comercial favorable y respaldando el ascenso en la diversificación de exportaciones.
De acuerdo con Coexport, la oferta de servicios para exportación –que incluye el sector de centros de llamadas– creció de 2,000 millones en 2016 a 4,000 millones en 2023, afianzándose como un pilar económico constante.
Retos y oportunidades
Aunque ha tenido éxito, la industria se enfrenta a desafíos:
- Mejorar condiciones laborales y salud mental: reducir estrés y rotación.
- Formación continua y especialización, para elevar salarios y productividad.
- Diversificación de servicios, agregando valor y avanzando hacia nichos más técnicos o especializados.
- Adaptación frente a la automatización, identificando áreas donde la inteligencia artificial complementa y no sustituye el servicio humano.